Hay seis tipos de miocardiopatía, de la siguiente manera:

 

Miocardiopatía dilatada (DCM)

Esto ocurre cuando la pared muscular del ventrículo izquierdo se agranda y se estira, debilitando así el corazón. La DCM puede afectar a cualquier persona, pero si se desarrolla durante el embarazo, puede denominarse miocardiopatía periparto.

 

Miocardiopatía hipertrófica (MCH)

Esto ocurre cuando el músculo del ventrículo se engrosa, lo que se conoce como 'hipertrofia', lo que hace que el ventrículo sea más pequeño. Como resultado, el corazón tiene que trabajar más y la MCH también puede bloquear el flujo de sangre que sale del corazón, un sub caso llamado hocm.

 

Miocardiopatía arritmogénica del ventrículo derecho (ARVC)

También conocida como miocardiopatía arrítmica, la ARVC ocurre cuando las células del músculo cardíaco no se unen correctamente. Como resultado, las células mueren y son reemplazadas por tejido cicatricial o grasa, lo que hace que el músculo cardíaco se estire, se adelgace y se debilite.

 

Miocardiopatía restrictiva (RCM)

Esto ocurre cuando el músculo cardíaco se vuelve rígido y no puede relajarse adecuadamente, lo que dificulta que las cámaras superiores se llenen de sangre. Entonces, las cámaras se agrandan y la sangre no puede fluir correctamente.

 

No compactación del ventrículo izquierdo (LVNC)

LVNC es el resultado de cómo se desarrolla el músculo cardíaco en un feto. Las células musculares no se compactan y esto provoca pequeñas hendiduras en el músculo, que parecen esponjosas y afectan el funcionamiento del corazón.

 

Takotsubo o síndrome del 'corazón roto'

Esto suele ocurrir durante un momento de estrés extremo, de ahí el nombre de "corazón roto", cuando el ventrículo izquierdo se agranda y se debilita. A menudo es solo temporal y, por lo general, mejora con el tiempo.

 

 

¿Cuáles son los síntomas de la miocardiopatía?

 

Muchas personas tienen miocardiopatía sin mostrar ningún síntoma, mientras que otras pueden experimentar dificultad para respirar, mareos, desmayos, cansancio, dolor en el pecho, palpitaciones y, en algunos casos, hinchazón en el abdomen y los tobillos.

 

Pueden aparecer signos de insuficiencia cardíaca e incluso muerte cardíaca súbita debido a arritmias.

 

 

¿Qué evaluación necesito si tengo una miocardiopatía?

 

Su cardiólogo explorará el historial de salud de su familia y normalmente le realizarán un ECG (electrocardiograma) y un ecocardiograma o una resonancia magnética / RMC.

 

Como la miocardiopatía se puede heredar, es posible que le recomiende que se recomiende a sus familiares de primer grado que también se realicen pruebas de detección (ECG y ecocardiografía).

 

 

¿Cuáles son los tratamientos para la miocardiopatía?

 

Desafortunadamente, no existe cura para la miocardiopatía; sin embargo, muchas personas toman medicamentos para aliviar los síntomas. Los medicamentos recetados regularmente incluyen anticoagulantes para diluir la sangre y reducir el riesgo de coágulos sanguíneos, diuréticos para reducir la acumulación de líquido y betabloqueantes para reducir la frecuencia cardíaca.

 

Algunas personas tendrán un dispositivo médico insertado en su cuerpo durante un procedimiento quirúrgico, ya sea un marcapasos que controla el ritmo del corazón o un ICD (desfibrilador cardioversor implantable) que controla el ritmo y descarga el corazón si el ritmo cambia de normal a un ritmo peligroso.

 

En una pequeña cantidad de casos, las personas se someten a una cirugía o una terapia de embolización mínimamente invasiva para extirpar parte del músculo cardíaco si afecta el flujo sanguíneo y, en muy pocas situaciones, las personas deben someterse a un trasplante de corazón.

 

 

¿Qué tratamientos / intervenciones ofrece CardioCare para la miocardiopatía?

 

Ofrecemos un seguimiento estrecho de esta enfermedad crónica en nuestra clínica de cardiología.

 

En caso de una Miocardiopatía Hipertrófica Obstructiva (HCOM), realizamos en los casos indicados el procedimiento mínimamente invasivo TASH (Ablación transcoronaria de hipertrofia septal).

 

Además, si está clínicamente indicado, realizamos la implantación de desfibriladores, también llamados ICD o AICD, así como dispositivos de resincronización cardíaca (CRT).